Ya se que para los que no estáis introducidos en el mundo del whisky, quizás cuando escucháis la palabra whisky se produce un terror que nubla vuestra mente. Pero tranquilos, yo también era así, todo fue cuestión de probar y no probar cualquier whisky y de cualquier forma, sino probar un buen whisky y de la manera adecuada. Ven a nuestros casinos móviles y diviértete en grande gracias a nuestros bonos inolvidables.
Este mes spirit cúbico lo voy a dedicar a enseñaros la destilería Glenmorangie y sus tres usos #muynuut para que podáis optimizar al máximo este destilado.
Para Glenmorangie fabricar whisky es un campo de juego sensorial con el que comparto dos frases que me encantan:
“Todos los sabores son posibles y potencialmente deliciosos”
“Deja que tu paladar lidere el camino”
En los tres videos voy a utilizar un producto muy versátil de Glenmorangie para que vuestra experiencia sea máxima:
GLENMORANGIE X: Se trata de la última incorporación a la familia de la espectacular destilería. Whisky de malta, perfecto para mezclar y crear deliciosas bebidas sin esfuerzo.
En él encontramos un toque más dulce de lo normal, y unos aromas a pera y vainilla. En cuanto a su sabor, se aprecian claramente notas a creme brûlèe y a chocolate fudge. Y un largo final en boca rico en especias, matiz que iba buscando con el pairing del mes.
¿Os hacéis una idea de ese punto goloso? Ya os advertí que ese miedo que os comentaba al principio, rápidamente se iría.